OTRA PARA CASA

Tras la victoria el año pasado de Alberto San Segundo y Eva Navas, este año Sergio Prieto y Sara Martín recogieron el testigo y consiguieron que el triunfo se quedara en Ávila tras remontar durante la segunda etapa del rallye.

La carrera comenzaba con expectación ya que el menor número de inscritos y la ausencia de coches “gordos” podía tener la contrapartida de una gran emoción en la lucha por los primeros puestos de la general. Tal y como se temía, el conflicto con las altas instancias federativas nacionales a cuenta de las licencias, tuvo su reflejo negativo en la lista de equipos dispuestos a batirse el cobre en la treinta edición del rallye abulense aunque seguía habiendo motivos más que fundados para disfrutar de un gran rallye; empezando por un recorrido, el habitual de las últimas ediciones, si descontamos los kilómetros perdidos en el tramo de Mijares al prescindir de la primera parte más cercana a Navarrevisca, o lo que se ha dado en llamar el “rallye de los puertos” ya que cada tramo consiste en subir y bajar trazados de montaña tan míticos como Serranillos, Arrebatacapas o El Boquerón, además del ya mencionado de Mijares.

Uno de los máximos puntos de interés del rallye era la lucha por el campeonato de Castilla y Léon, que se cerraba con nuestra carrera, entre Juan Rodríguez e Iván Aparicio, separados en la general por tan solo un punto en favor del primero. El líder virtual de la clasificación, Félix Macías, decidía no acudir a Ávila por lo que solo una improbable doble desgracia de sus dos perseguidores le permitiría conservar su puesto y hacerse con el título. El primero decidido a aprovechar los más de 450 kilómetros del rallye era Iván Aparicio que con su BMW y con César Alonso Abril a las notas imponía un fuerte ritmo que el Clio de Juan Rodríguez y Christian Morán no podían seguir. De hecho, el único que se acercaba a los tiempos de Iván era el local Sergio Prieto con su afinado Peugeot 205. La primera etapa del rallye se cerraba en el parque de pernoctación de Cebreros con Aparicio líder con más de medio minuto de ventaja sobre Prieto, con Juan Rodríguez tercero a casi un minuto.

Suponemos que la noche del sábado al domingo sirvió a Iván Aparicio para bajar pulsaciones y decidir que el domingo se limitaría a llevar el coche a meta con seguridad, ligeramente pendiente de los tiempos de Rodríguez para poder levantar virtualmente el título en la meta del Asador El Pórtico de Ávila. Dicen que la ocasión la pintan calva y Sergio Prieto era consciente de que era una oportunidad pintiparada de inscribir su nombre en el palmarés de oro del rallye de la tierra, así que se lanzó a una remontada que al final le llevó a conquistar el trofeo de vencedor con treinta y cuatro segundos de ventaja sobre el nuevo campeón regional, con Heriberto Rodríguez y Juan José Suárez cerrando los puestos de podio. Juan Rodríguez, convencido de que tenía la batalla del campeonato perdida caía hasta la cuarta posición con Guillermo Millán y Fernando Jiménez en la quinta plaza final con su Renault Clio Rallye 5.

Así que, como viene siendo habitual, doble alegría en la meta de Ávila. Sergio Prieto y Sara Martín celebraban un triunfo de mérito, mientras que Iván Aparicio y César Alonso tenían incluso más motivos para el festejo ya que, a falta de confirmación oficial, se convertían en campeones regionales por primera vez.

La entrega de trofeos, además, contó con un momento muy emotivo con la entrega de una placa a Rebeca del Pozo, que participó como copiloto de José Luis Martín San José, en memoria de su marido David López Tomico, fallecido hace siete meses en un desgraciado accidente en el Rallyesprint de San Bartolomé. Como rezaba el recuerdo entregado, su dedicación y amor por el automovilismo siempre será un ejemplo para todos.

Igual de ejemplar es la afición abulense que volvió a acudir en masa a ver su rallye a pesar de que no tuviera tantos atractivos como ediciones anteriores; al menos pudo disfrutar de unas condiciones climatológicas mucho más benignas que las sufridas en 2022. La anunciada borrasca tuvo el detalle de retrasar su llegada para respetar el XXX Rallye Diputación de Ávila – Trofeo Cerverauto – Hyundai.

Crónica de Jose Manuel Sánchez Plaza

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